La verdad, aunque esté en minoría, sigue siendo la verdad...

La burguesía disfraza su propio interés particular, para que de tal forma, ese interés particular forme parte del interes general

domingo, 29 de marzo de 2015

Las alamedas deben quedar abiertas

Supongamos estas condiciones, luego de muchos años de gobiernos conservadores, un país de gran desigualdad social se permite tener un gobierno popular, progresista y de los trabajadores.
Inmediatamente se reconocen los derechos que las clases menos favorecidas vieron violados por décadas, sectores olvidados que por fin son tenidos en cuenta. Pero claro, muchos derechos concedidos a los pobres equivale a resta de privilegios de los sectores más ricos a quienes se les exige conceder condiciones dignas a sus trabajadores, sueldos en blanco y pagar impuestos. En pocas palabras, cumplir la ley, algo que a nuestras oligarquías le cuesta bastante.
El malestar de los poderosos no se hace esperar, la clase alta no concibe un país para todos, sino un país a disposición de una minoría adinerada, rentista y patricia que debe ser servida por una amplia mayoría de lacayos y por un estado títere que no debe cuestionar sus caprichos, se expresa en acciones concretas, incesantes, lo que se conoce como Conspiración. Si ésta es además ayudada por una potencia extranjera que mira con muy malos ojos el gobierno popular entonces no habrá nada que la haga claudicar.
En La Hora de los Hornos, Octavio Gettino establece la existencia de la oligarquía local como un ejército de ocupación no extranjero, como un país más pequeño y más poderoso dentro del territorio nacional gracias al cual esta oligarquía ostenta su status y es capaz de apoyar acciones que perjudiquen al país en general con el fin de recuperar el sistema que la beneficia.
Claro que la manera de recuperarlo puede variar según el contexto, si se decide hacerlo por vías democráticas, entonces será necesario convencer a las mayorías de que el gobierno popular es nefasto, tiránico, ineficiente, etc. Para ello es vital generar malestar entre los ciudadanos, eso se puede lograr de varias maneras:











  1. Acaparamiento, desabastecimiento e inflación: Entre los más acaudalados están quienes producen, acopian, distribuyen y venden productos de primera necesidad. Retener toneladas de algún alimento X no va a ser perjudicial para un sector acaudalado (y quizá solventado desde el exterior) aunque si para el país. Esto generará una sensación de escasez, los productos que escasean se encarecen, y más si sólo se consiguen en un mercado negro. Los precios se disparan y por más que los productos reaparezcan, los precios no vuelven a bajar. Esta técnica se sostiene gracias a los medios de comunicación planteando las "teorías autocumplidas": si un noticiero dice que la semana que viene va a faltar el aceite comestible, aquellos que siempre compran una botella por quincena van a comprar 4 o 5 botellas en una vez y la escasez efectivamente se va a producir. Esta metodología goza de cierta actitud cómplice de los consumidores, quienes muchas veces le adjudican a los gobiernos la culpa de la escasez y de los altos precios, nunca al empresario productor y/o vendedor. También se aspira a debilitar voluntades, una madre simpatizante de un gobierno popular podría sospechar cierta ineficacia de éste si no consigue pañales y leche para su bebé, por ejemplo.
  2. Boicot parlamentario y judicial: Ante un ejecutivo refractario a los intereses elitistas, los reductos que le quedan a los sectores acaudalados son los otros dos poderes del estado: el legislativo (con representación de la oposición) y el judicial (que en muchos países sigue siendo un poder aristocrático, conservador y con algunos privilegios). Si el punto 1 sale bien (y el descontento social generado repercute en elecciones legislativas de medio término), o el gobierno nacional aún no pudo trasladar su mayoría al parlamento, es mucho lo que se puede obstaculizar su marcha a través de un congreso negador, que no sancione leyes vitales para el ejecutivo o que inicie acciones contra sus funcionarios. Aquí la parte judicial hace lo suyo, no pocos miembros de espacios progresistas han sido acusados de corrupción por medios corporativos, algún fiscal se hizo eco, y esto inició pilas de causas judiciales promovidas por miembros de la justicia elitista y con una permanencia en los medios de comunicación que implica un constante deterioro de la imagen del político acusado. Si hay pruebas de lo que se lo acusa, no importa. Estas persecuciones, denuncias, generan un impacto en sectores reaccionarios de la clase media además de otros aspectos pasibles de afectarla como inflación o inseguridad y que son el tema predilecto de los medios de comunicación corporativos, siempre proclives a desesperar al público en lugar de entretenerlo e informarlo
  3. Movimientos estudiantiles: Siempre nos dijeron que asistir a la universidad implica aspirar al ascenso social. Lo cual es cierto, el problema es que algunos aprovechan ese ámbito para promover políticas funcionales a la derecha. Lo paradójico es que muchos de éstos movimientos dicen ser de izquierda (por caso, los trotskistas) con una estrategia radical: o cambia todo, o este gobierno no sirve. Incapaces de reconocer algo bueno por mínimo que sea, terminan pareciéndose al conservadurismo más aberrante. Obviamente las universidades más acaudaladas, donde los hijos de la élite asisten, también llegado el caso pueden movilizarse para defender los privilegios familiares.
  4. Ofensivas Gremiales y Patronales: Cuando la burguesía está descontenta suele apoyar paros patronales: los empresarios deciden no abrir sus empresas. Estas acciones reciben también el nombre de lock out y en no pocas oportunidades fueron la antesala de golpes de estado. Lo cierto es que siempre es mejor ganarse un sector de los trabajadores, "robarle" al gobierno popular el apoyo de algunos sectores obreros para "demostrar" que el gobierno falla. Es allí donde la conspiración busca el apoyo de centrales obreras específicas. En el sistema económico no todos los gremios tienen la misma relevancia, sin duda los gremios del transporte terrestre (ferroviarios, camioneros, de pasajeros) pueden hacer colapsar a todo un país si llaman a un paro porque afectan adicionalmente a sectores ajenos y le imprimen al reclamo una fuerza mayor más por acatamiento forzado que por convicción en la lucha. En nuestras economías en desarrollo hay gremios vinculados a actividades extractivistas (que ocupan un gran sector de la economía) que pueden privar al país de insumos para producción interna como de divisas provenientes de exportaciones: minería, agricultura, ganadería, gas y petróleo. No es de extrañar que en un país cuya burguesía esté enfrentada al gobierno existan reclamos de ciertas aristocracias obreras a modo de extorsión, a sabiendas de que un paro en esa actividad importante puede ser catastrófico para el estado, y una ganancia para los oligarcas. De paso les da el apoyo popular que estaban buscando, los medios de comunicación (de propiedad de esos oligarcas) se regodean en mostrar a la gente común, trabajadora, que tampoco quiere al gobierno que dice defenderlos. 
  5. Factores externos: La injerencia de potencias extranjeras es una constante. El Plan Cóndor es un claro ejemplo de coordinación entre conspiradores locales y servicios de inteligencia de los EEUU. Los primeros trabajos de campo se realizan a través de organizaciones de presunta beneficiencia como la Ned o la USAid, después se organizan agrupaciones fascistas, xenófobas que perpetran actos violentos para preocupar o atemorizar a la población alardeando de simbología pseudo nazi, esto convencería a muchos de que el país está sumido en un caos profundo. Observando el punto 4, la suma de apoyo popular a los reclamos de la élite permite agregar la posibilidad de choque con las fuerzas del orden. Esto sugiere la idea de "represión", de un gobierno dictatorial. Si estas revueltas generan muertos, el impacto es mayor y los conspiradores se benefician. Además existen los infiltrados y los traidores. La CIA no escatima dinero para alcanzar sus fines y puede colaborar directa o indirectamente en conseguir los traidores corruptos funcionales a sus fines y eliminar cualquier obstáculo que se le interponga.
  6. Mercado Negro de moneda extranjera: Las clases altas tienen mayor facilidad de conseguir y operar en moneda extranjera, así como los exportadores. Esto implica cierto privilegio en el acopio de la misma y poder manipular el mercado a su antojo elevando su valor en el mercado negro. Además les permite forzar una ganancia neta mayor si consiguen con estas tretas devaluar la moneda local, algo fácil de conseguir en un contexto crítico.
  7. La acción de los medios de comunicación: Tema recurrente de ésta página al que le dedicamos muchas líneas. Los medios sirven para generar la impresión de que los enemigos de la burguesía lo son del pueblo en general, pero para que eso sea creíble hay que generar psicosis colectiva a través de problemas puntuales fáciles de generalizar (inseguridad), de generación propia (inflación, corrupción). No olvidemos, los medios de comunicación son corporaciones cuyos dueños pertenecen a la misma oligarquía prebendaria que atenta contra los intereses populares.
Éstas operaciones se vieron en muchos lados, póngale el nombre del país que quiera: Venezuela con Chávez-Maduro o Argentina en 2008 (crisis de la soja), Bolivia en 2008 (crisis de la media luna boliviana), Paraguay en 2012 (y golpe blando contra su ex presidente Fernando Lugo), Neogolpismo en Honduras (2009), pedidos de impeachment en Brasil contra la presidenta Dilma Rousseff (2015) o Chile de 1973. 
Éste último caso es el que trata este multi premiado documental en fragmentos llamado La Batalla de Chile y relata el contexto previo al golpe de estado que derrocó al Presidente Salvador Allende. Las notas e imágenes (de gran calidad a pesar de los años) revelan actitudes que nos pueden sonar familiares en estos días, como si ciertas cosas no hubieran cambiado mucho, pero aspiramos a que cambien nuestras mentes y a no repetir errores.


I- La Batalla De Chile/ La Insurrección De La Burguesía from alvarezmeo on Vimeo.

En el primer envío se trata la situación política anterior al golpe, con una oposición que gasta todas las instancias democráticas para derrocar el gobierno de la Unidad Popular. En el segundo aparece la "solución" militar, violenta, desoyendo la voluntad popular y donde se hace mención del dictador que asoló Chile durante el período 1973-1991.
No buscamos revancha, sólo hacer un poco de memoria, a disfrutar de esta joya documental.






viernes, 27 de marzo de 2015

La Trampa I: El mundo está plagado de jodidos

Al poder dominante siempre le preocupó que los sectores populares se rebelasen contra el orden establecido una vez que fueran conscientes de las injusticias del sistema. Para evitar cualquier alteración del statu quo no sólo basta con una permanente propaganda que nos obligue a comportarnos de una determinada manera, a pensar de cierta forma o que nos establezca paradigmas del bien y del mal para tenernos dominados, se ha logrado inocular en la población un concepto nefasto sobre la humanidad (o sea, sobre si misma) que hace que el sistema del "sálvese quien pueda" sea el único admisible.
Se crearon instituciones científicas para estudiar a la población como el Instituto Tavistock e incluso se llevaron a cabo experimentos sociopolíticos a gran escala como la Doctrina del Shock que se aplican luego de que verificarse ciertas condiciones propicias para dar golpes como ese. La clave es averiguar en que momento la sociedad asume cierta idea instalada como una certeza irrefutable, y a partir de eso imponerle algo que si conociera en su totalidad, no lo aceptaría (modelos represivos, recorte de libertades, neoliberalismo, etc.)

John Nash
El mundo es una gran mesa de juego
El matemático John Nash desarrolló la Teoría de Juegos, según la cual todos los jugadores que compiten entre sí en un juego de cartas velan por su suerte personal, y en consecuencia, sospechan, vigilan, traicionan o intimidan a cada uno de sus rivales para sacar ventaja. En el póker, o en el truco hay que hacerle creer siempre a nuestro rival que tenemos mejores cartas que las que realmente nos tocaron en suerte, esto haría que se intimide, que no haga jugadas osadas, lo cual nos incrementa las chances de salirnos con la nuestra. John Nash estableció que esta metodología egoísta era trasladable a la sociedad donde, según él, todos los seres humanos tratamos de presionar, intimidar o traicionar a nuestros semejantes con el único fin de obtener un lucro propio sin importar las consecuencias, como en el juego de cartas.
Pero claro, todo esto funciona bien hasta que encuentro a uno que juega mejor que yo, sino ganaría siempre y esto provocaría que nadie quiera jugar conmigo, el juego sería previsible, aburrido. Este sistema de conspiraciones, estrategia y suerte determina cierto "equilibrio" establecido por las posiciones finales del juego que diferencia entre ganadores y perdedores.
Esta doctrina matemática ganó fanáticos en el mundo de las finanzas y de la política. En el marco de la Guerra Fría, la carrera armamentista entre la URSS y EEUU fue vista como un juego de intimidación mutua de las superpotencias. Las armas nucleares (que nunca utilizaron directamente uno contra el otro) eran las cartas que permitían mostrarse para intimidar al rival. Esto vino agregado a una sobreestimación del poder destructivo del rival para justificar el rearme propio. Aquí el equilibrio se estableció por la tenencia de armas de ambos bandos, no necesariamente para usarlas, sino para incoar al enemigo a no aventurarse a un ataque so pena de costosas represalias.

La imposición de la teoría de Nash en las masas
Friedrich von Hayek
La Teoría de Juegos fue impuesta a nivel social entre los años 60 y 70 del siglo pasado, según ella, la sociedad plantea un juego permanente donde todos los individuos (jugadores) persiguen la realización personal más allá de cualquier grado de altruismo expresado por cada uno.
Es más, los fieles a esta doctrina consideran que los mejores políticos son aquellos que persiguen su beneficio personal independientemente de su afán por ayudar al pueblo. Entre los cultores de este sistema que alienta las desconfianzas mutuas destacan referentes del Neoliberalismo como el economista Friedrich von Hayek, la ex primer ministra británica Margareth Thatcher, y también muchos de los más encumbrados neoconservadores estadounidenses.
Se puede ver como esta doctrina abstracta logró imponerse en ciertas sociedades, es habitual entre los estadounidenses referirse a alguien con poca suerte como un loser (perdedor) como si efectivamente los devenires de la vida formaran parte de un juego.
Toda esta doctrina tiene una falla no menor, supongamos por un momento que podamos representar a la vida como un gran juego de cartas, cabe reconocer que en ese juego usted jamás va a recibir las mismas cartas que Bill Gates o que David Rockefeller. Como si al mazo lo dividieran entre cartas buenas (las que recibe la élite) y cartas malas (que destinan para nosotros), y lo peor es que los poderosos saben que siempre tienen manos ganadoras, mientras usted, gracias al gran sistema de propaganda, se cree que tiene la libertad de juego total aceptando sus reglas como justas.
El documental que hoy presentamos es la primera parte de las 3 de The Trap (La Trampa) realizado por Adam Curtis para la BBC y trata sobre las técnicas que se estudiaron para hacernos creer que traicionar a nuestros pares es inherente a nuestra naturaleza.

"Si entre ellos se desconfían, jamás osarán unirse para cuestionar nuestro poder...."

La Trampa Episodio 1 "Jode a tu compañero" por lapropaganda2



jueves, 12 de marzo de 2015

El simpático violador de los secretos mejor guardados

Julian Assange, creador de Wikileaks
Hemos tratado varias veces en nuestra página el hecho de la desinformación, estamos pésimamente informados de la realidad a través de los medios hegemónicos, nos enteramos muy poco de lo que realmente ocurre. Esto da lugar a que una organización que se proponga obtener información confidencial, que moleste a los poderes fácticos, se transforme en un referente para aquellos que buscamos un mundo más justo.
Julian Assange es un periodista y programador australiano creador del sitio Wikileaks que lo llevó a la fama. El sitio alcanzó notoriedad por publicar información secreta (e incómoda) sobre distintos gobiernos. Esta información en general estaba enmarcada como "Secreto de Estado" y ponía en evidencia viles actitudes de sujetos que siempre nos son presentados como los buenos por los medios de comunicación tradicionales.
Entre las denuncias se pueden destacar los múltiples atropellos del ejército estadounidense en Irak y las aberrantes violaciones a los derechos humanos en la base de Guantánamo que le dieron una fama considerable a la página. Wikileaks tuvo que pactar con medios como The Guardian o Der Spiegel para que publiquen sus investigaciones ya que dichas denuncias en internet tenían escasa repercución. Con la fama de la página, se agigantaba la figura de su creador y cara visible Julian Assange, hombre preocupado por su imagen y bastante mediático, que formó Wikileaks como una organización de programadores, nerds variopintos y periodistas ávidos por molestar a los grandes poderes revelando sus secretos inconfesables.
Wikileaks contó con filiales de diferentes países como Alemania, Reino Unido o Islandia (en particular a éste último Assange lo veía como "la Suiza de la libre información") que procesaban la información proveniente de informantes secretos y hackers a quienes el gobierno de EEUU y aliados pretenden capturar. Entre los casos más resonantes de esta clase de "soplones" destaca el agente de inteligencia del ejército de EEUU, Bradley (Chelsea*) Manning, que fue acusado de la mayor filtración de documentos secretos y condenado a 35 años de prisión. Por suerte, pocos de estos informantes fueron descubiertos.
Estas denuncias no le iban a salir baratas a Assange, su organización tuvo que vagar por varios países hasta encontrar uno donde el derecho a la libre información esté asegurado, esa tierra prometida fue Suecia, pero ni allí Assange tuvo paz.
EEUU no le iba a perdonar a Assange la revelación de acciones en Irak tan aberrantes como las cometidas en la Guerra de Vietnam (y que provocaron una considerable impopularidad de esta guerra entre los estadounidenses), y como no hay mejor defensa que un buen ataque, Assange fue acusado de acoso sexual y violación por 2 suecas que habrían tenido algún contacto íntimo con el líder de Wikileaks.
El periodista siempre negó las acusaciones de éstas mujeres aludiendo a una operación de EEUU para poder meterlo preso (o ejecutarlo) por divulgar información, una garantía que EEUU dice respetar.... siempre que sea divulgar la información a que a la Casa Blanca le convenga.
Esto hizo que Assange pida asilo en la embajada ecuatoriana en Londres donde está encerrado desde junio de 2012. Ignoramos si la denuncia es falsa, pero tenemos razones para ponerla en duda. Los años de oro de Wikileaks no son estos, algunos otrora colaboradores de Assange formaron sus propias agencias, como por ejemplo el alemán Daniel Domcheit Berg, ex segundo de Assange quien formó OpenLeaks y recientemente destruyó 5Gb de información del Bank Of America, otros terminaron peleados con Assange quejándose de su supuesto autoritarismo. Quizá esto demuestra que aquellos poderes afectados por las denuncias de Wikileaks finalmente consiguieron su objetivo, sus miembros disgregados, algunos quizá corrompidos, otros difamados.
Democracia, ¿adónde estás?


*Manning se declaró como mujer transexual e inició un tratamiento para cambiar su sexo. Desde 2014 se le reconoció que pase a llamarse Chelsea Manning. Aún sigue presa.

martes, 10 de marzo de 2015

El Otro Reich

Otto Reich
Todo imperio que se precie como tal debe contar con hombres que conozcan algo de aquellos estados a los que piensa someter. Si estos personajes guardan sus escrúpulos bajo la alfombra (suponiendo que alguna vez hayan tenido alguno), mejor.
El caso de Otto Reich es paradigmático, de madre cubana y padre austríaco se exilió con su familia en los EEUU siendo muy pequeño ante el triunfo de la Revolución Cubana. Desde entonces este "semicubano" de nombre teutón no ha hecho más que acopiar un gran resentimiento contra Cuba y contra cualquier régimen latinoamericano que mínimamente se le asemeje.
Entró a jugar en las grandes ligas de la política estadounidense en los 80 bajo el gobierno de Ronald Reagan. La guerra sucia de EEUU en Latinoamérica había sido iniciada por Richard Nixon y Henry Kissinger con el Plan Cóndor y siguió con Reagan centrada fundamentalmente en el Caribe donde continuaban las conspiraciones de la CIA contra gobiernos democráticos que no le caían en gracia al Tío Sam (El Salvador, Nicaragua, Grenada, Panamá, Cuba).
Otto Reich fue el encargado de coordinar las operaciones de injerencia en esos países "descarriados" apelando a toda clase de artimañas sucias para "salvar" a Latinoamérica del fracasado sistema socialista, miren que altruista el hombre. Su nombramiento como embajador en Venezuela fue clave para monitorear todas las operaciones de la CIA en los territorios a controlar. Para ello no dudó en apadrinar actos terroristas así como en proteger a sus perpetradores  a los que les facilitó hasta vías de escape de sus presidios (entre ellos el criminal Luis Posada Carriles), fue pieza fundamental del caso Irán-Contras en el cual EEUU le vendía armas en secreto al gobierno de Irán (considerado enemigo por la Casa Blanca desde la Revolución Islámica) para financiar a un grupo de mercenarios (los Contras) que desde la selva centroamericana intentaban derrocar al gobierno sandinista nicaragüense. Ah, ¿usted creía que lo que hicieron en Libia y Siria era nuevo? No, la civilizada comunidad internacional hace rato que financia grupos golpistas-terroristas con dinero proveniente de lugares inconfesables. Ya está todo inventado...
Reich opinando sobre la muerte de Hugo Chávez para la CNN
Reich es un republicano de pura cepa, también trabajó en los gobiernos de los Bush (padre e hijo) y también colaboró con el fallido golpe de estado contra Hugo Chávez en Venezuela en Abril de 2002. Más allá de este hecho, la escasa atención que el gobierno de George W. Bush (más preocupado por Afganistán e Irak) le dedicó a Latinoamérica, opacaron su labor aunque nunca dejó de conspirar. Se sabe que apoya algunas asociaciones como la USAid creadas para desestabilizar gobiernos bajo el disfraz de "ayuda humanitaria".
Hoy el hombre ya está entrado en años y mientras espera la vuelta republicana a la Casa Blanca para esperar algún cargo gubernamental, se dedica a seguir en la palestra desfilando por los medios más conservadores para repetir la perorata republicana contra gobiernos como el de Venezuela o Cuba.
¿Se le puede creer a un estado canalla como EEUU mientras existan sujetos como este que aspiran a seguir tomando decisiones sobre millones de vidas que no conocen su nombre?
En días en que toma relevancia cierto acercamiento entre Cuba y EEUU, y a horas de un duro informe de la Casa Blanca contra Venezuela, no olvidemos que los imperios tienen mañas, que siempre buscan su objetivo aplicando ora "mano dura", ora "mano blanda" con el afán de perjudicar siempre a los mismos.