La verdad, aunque esté en minoría, sigue siendo la verdad...

La burguesía disfraza su propio interés particular, para que de tal forma, ese interés particular forme parte del interes general

miércoles, 30 de julio de 2014

Macondo siglo XXI

Presidentes Obama (EEUU) y Santos (Colombia)
Faltan las bananas pero está el arroz, falta la prosa exquisita del magistral Gabriel García Márquez, pero está la realidad que parece poner en duda el realismo mágico de Cien años de soledad, tampoco tenemos a la United Fruit, pero hay otras empresas que no tienen nada que envidiarle a la histórica compañía yanqui, no hablamos de Macondo, sino de Campoalegre, un pueblo colombiano que por lo que les pasa a sus habitantes de alegre, le está quedando el nombre solamente.


La fantasía de los TLC: Pan para hoy, hambre para mañana
Hace unos años Colombia firmó un tratado de Libre comercio (TLC) con EEUU. La nación sudamericana tiene la particularidad de oscilar entre gobiernos de derecha.... y de ultra derecha y su clase dirigente se encargó de "vender" el TLC con las mismas patrañas de siempre: que va a generar miles de nuevos puestos de trabajo, que se abre al país un enorme mercado (el estadounidense) de 300 millones de consumidores y demás tontería para que finalmente EEUU le termine vendiendo a Colombia los mismos productos que hasta hace años ésta producía o bien inoculando severas leyes estadounidenses en la legislación colombiana para preservar los derechos de las multinacionales yanquis que gracias al tratado engrosaron sus beneficios.
El mercado de las semillas está entre los más rendidores del mundo y son pocas las transnacionales que lo dominan, las 3 más importantes acaparan casi la mitad de las transacciones: Monsanto, Syngenta y Dupont.
Estas empresas adonde se instalan exigen leyes que les permitan controlar el tráfico de granos, alteran las semillas artificialmente, por lo cual se arrogan el derecho de exigir a los productores la compra permanente de las mismas (a las cuales consideran un producto de ellos, y no un ser vivo) bajo amenaza de incautación de lo producido y hasta de acciones judiciales.

La semilla es mía, mía, mía!!!
Humor sobre el TLC Colombia-EEUU
El cinismo de estas empresas es tal, que ciertos vegetales como la soja (que de natural tiene cada vez menos) se producen en base a semillas alteradas para que sólo sea fértil la primera generación. De tal forma que si un campesino quisiera guardar semillas de su producción para el año venidero, además de ser acusado de un ilícito, no va a conseguir nada, las semillas de su producción son totalmente estériles, en consecuencia deberá comprar otra vez a la empresa nuevas semillas para plantar.
En este caso tras el disfraz de una ley 970 se analiza la situación de Campoalegre, una localidad colombiana que vive de la producción de arroz cuyos pobladores sufrieron la destrucción de miles de bolsas de arroz porque lo produjeron sin haberle comprado las semillas a la empresa "dueña" que monopoliza el producto sino que utilizaron el viejo método de plantar las semillas que ellos mismos guardaron de años anteriores.
La excusa es conocida, las empresas hacen lobby para conseguir que las leyes obliguen a los campesinos a comprarles, para ello se necesita la intervención de un organismo estatal (en este caso el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA) que inventa una serie de engorrosas normativas para transformar en delito algo que nunca lo fue y así conseguir bajo el marco de la "legalidad" que el monopolio trasnacional incremente su negocio.

El TLC y las consecuencias políticas
Lamentablemente Colombia se ha transformado en el centro de operaciones del ejército de EEUU en Sudamérica. Hay 7 bases militares norteamericanas en territorio colombiano y los marines apostados allí cuentan con inmunidad, cualquier desliz que cometan, por grave que sea, no puede ser penado por la justicia colombiana.
Algunos creen que la existencia de estas bases sirve para reforzar la presencia militar de EEUU en un continente que se volvió bastante reacio a la histórica injerencia de Washington en nuestros países.
Colombia si bien participa activamente de reuniones de la UNASUR y la CELAC, organismos que no cuentan con la presencia de EEUU ni Canadá y suelen ser bastante críticos de Washington, integra un grupo formado de hecho a contracorriente del "eje bolivariano" (o de la Latinoamérica más progresista) junto a México, Panamá, Perú y Chile (con chances de sumar al Paraguay) conocido como la Alianza del Pacífico que nuclea a países que respetan el modelo neoliberal y miran con desconfianza una unión con Venezuela, Ecuador o Bolivia.




lunes, 28 de julio de 2014

La crisis no es solo griega

Por estos días una de las noticias del mundo económico es la presión judicial de fondos de inversión denominados holdouts, más conocidos popularmente como Fondos Buitre, sobre la Argentina para que pague el valor nominal de su deuda. Estos fondos se caracterizan por comprar deuda a muy bajo costo de países en crisis y luego reclamarla por la totalidad de su valor nominal más los interesas de la mora.
Estados como Perú o Liberia han sufrido las presiones de estos fondos que se aprovechan de los muy buenos contactos judiciales con que cuentan en los países (en general de la Unión Europea o EEUU) donde se resuelven los conflictos entre los países deudores y sus acreedores.

La deuda Odiosa
Presidente de Ecuador Rafael Correa
Este concepto fue estudiado largamente a través de la historia, muchos países han logrado demostrar que parte de su deuda externa es ilegítima. Los fundamentos de la deuda odiosa o ilegal son:

  1. Que el préstamo sea pedido sin el permiso del pueblo o deliberadamente a espaldas del mismo.
  2. Que el dinero se utilice en gastos que no consistan en inversiones provechosas para la mayoría de la población (inversión social).
  3. Que el prestamista conozca las razones anteriores y se haga el desentendido, su plan es prestar dinero y que se le devuelva con altos intereses sin preocuparse en qué fue destinado.
La última quizás sea más una regla que una rareza, pocas veces el FMI, el Banco Mundial, el Banco Central Europeo o el Club de París se preocupan en que el dinero prestado se destine a beneficios para el pueblo del país deudor, aún más, ha ocurrido en múltiples ocasiones que estos entes financieros prestaron dinero a países en crisis bajo la condición de que éste sea utilizado de determinada manera, por lo general con fines ajenos a las urgencias sociales. Por esto, los auditores de estos organismos visitan a los países deudores para verificar que cumplen con lo pactado, es así como el dinero de los préstamos se gasta en carreteras, aeropuertos o acondicionamiento de barrios cerrados mientras las escuelas, los salarios y hospitales se caen a pedazos y la desocupación aumenta.
El caso griego es flagrante, varios préstamos otorgados al país debían destinarse a gasto militar y a mejorar accesos o facilidades para las multinacionales (mayoritariamente alemanas) instaladas en Grecia. Con suerte si de eso sobra algo para repartirle al pueblo en algo que valga la pena.
Algunas veces el concepto de deuda ilegal o no reconocida, fue utilizado por potencias invasoras para no pagar las deudas de los países invadidos. También el condonamiento de deuda se ha utilizado excepcionalmente para conseguir algo a cambio del país beneficiado y como algo que el acreedor concede sin pedido expreso del país deudor, no sea cosa que otros estados pretendan lo mismo.
Fue Rafael Correa en Ecuador quien se animó a auditar la deuda con un comité de notables, ajeno al mundo financiero neoliberal y consiguió un importante recorte de la deuda externa eliminando la que fue probada como ilegal.

El caso argentino
Sin embargo no siempre se tiene el mismo resultado que en Ecuador, la República Argentina hizo algún intento por determinar qué parte de su deuda era ilegítima en los años '80 del siglo pasado, argumentos había de sobra, la deuda externa se incrementó un 364% durante la dictadura militar de 1976-83 en gran parte porque se nacionalizó deuda de empresas privadas (Celulosa, Banco de Italia, Alpargatas, Grupo Clarín, Perez Companc, Acindar, etc.) que habían hecho buenas migas con la junta de dictadores y sus sucesores (Videla-Massera-Agosti, Viola, Galtieri y Bignone), según la opinión del economista argentino Alejandro Olmos, una deuda contraída por una dictadura jamás podía ser considerada legal, sin embargo los intentos por declararla ilegal durante el primer gobierno democrático de Raúl Alfonsín (1983-89) fueron frustrados por las presiones del poderoso empresariado enriquecido durante la dictadura, por el debilitamiento político del gobierno por las conspiraciones militares desde dentro y por el factor externo liderado por el FMI y los EEUU que dieron por tierra con el plan de Alfonsín de formar un club de países deudores.
La deuda argentina siguió creciendo durante la etapa neoliberal liderada por Carlos Menem (1989-99) gracias a que el crédito exterior y no la producción, mantenían la convertibilidad del peso al dólar 1 a 1 y cierta estabilidad en los precios de igual forma que congelaba salarios y jubilaciones, aumentaba la pobreza y desocupación y destrozaba la otrora incipiente industria argentina.
Esto derivó en la crisis del 2001, la renuncia del entonces Presidente Fernando de la Rúa y el posterior default (cesación de pagos a acreedores).
Luego de años críticos y de una falta de pago que alejó a la Argentina del crédito internacional, el gobierno de Néstor Kirchner consiguió una fuerte quita de la deuda (aceptada por un 92% de los bonistas) y una cancelación de la deuda con el FMI.
Sin embargo ese casi 8% que no aceptó la reestructuración de la deuda está conformado por los mencionados fondos buitres ha conseguido a través de la justicia de EEUU presionar a la Argentina para que el país le pague la totalidad de la deuda, en caso de que el gobierno acate la decisión se podría dar que todos los demás acreedores (incluidos los que aceptaron la quita) exijan el pago original mediante juicios, con lo cual todo el esfuerzo de estos años habría sido en vano.
¿Es correcto que un país retorne a una etapa de crisis por honrar sus deudas? ¿se debe privilegiar la deuda externa o la interna? El riesgo de esta situación proviene del privilegio de que gozan los capitalistas en el sistema actual por sobre los intereses populares, mientras los acreedores no están dispuestos a esperar por el pago de la deuda, ni a someterse a una quita, los pueblos oprimidos parecen condenados a una eterna miseria cuya solución no es prioridad para los mercados.

El mercado es para pocos y las perdidas para todos

La deuda externa siempre es una preocupación porque condiciona las finanzas de los países, resta soberanía. Los gobiernos terminan siendo administradores de la deuda en vez de beneficiar óptimamente a su pueblo.
El sistema financiero está terriblemente equivocado, la especulación es premiada y protegida. Los estados son condenados a someter sus intereses a los de las multinacionales: una empresa que denuncia a un estado por incumplimiento debe ser indemnizada por éste, mientras que cuando un estado no está conforme con el accionar de una empresa debe indemnizarla para excluirla del negocio (por ejemplo, caso Repsol en Argentina). Los tribunales financieros como el CIADI suelen tener mayor debilidad por las empresas a la hora de resolver diferendos entre multinacionales y estados.
A esto se suma un dominio discursivo de los poderes financieros que siempre pretenden tener razón. Se busca culpar a los estados deudores por incumplidores, por no seguir con las recetas del mercado, por tener políticos corruptos, por no desarrollarse, todos pecados que el mismo mercado fomentó. Nadie cuestiona la usura de los organismos de crédito, la explotación de las multinacionales ni a los tecnócratas neoliberales que parecen gozar de impunidad absoluta.

La fiesta hay que pagarla?
Desde hace unos años es notoria la crisis que somete a algunos países de la Unión Europea que ingresaron a la zona Euro creyendo en el sueño neoliberal. Sin duda hubo algunos años de bonanza, es la llamada "burbuja" donde se consiguen ciertos progresos superficiales, un aparente bienestar y ciertos lujos que hacen creer a muchos en que el sueño de haber llegado al Primer mundo se hizo realidad. Pero a eso no deja de ser una fantasía  a menos que esa situación se sostenga con trabajo y producción, sino más tarde o más temprano la burbuja revienta.
Esa fantasía no es gratuita, las mieles neoliberales mientras duran seducen a la clase media con lujos nunca antes vistos, permiten el enriquecimiento rápido de grandes empresas y desfalcos de toda índole se sostiene en base a deuda mientras se silencia la destrucción de la industria local y como siempre, se oculta la creciente pobreza.
Así llegamos a la situación de los países industrialmente menos desarrollados de Europa: Portugal, Irlanda, Grecia y España (por sus siglas en ingles, los llamados "PIGS", que también quiere decir cerdos en ese idioma), que son señalados por las potencias presentadas como "serias" como países endeudados y en crisis por tener poca afinidad con el trabajo, por vagos, corruptos o ineficientes. Políticos de países del norte de Europa son proclives a culpar a estos estados por su propia desgracia, nunca van a confesar que empresas de esos países "serios" han provocado esa situación, sin hablar de la presión de los organismos financieros continentales, más preocupados por proteger los privilegios de los empresarios que por el bienestar de los ciudadanos.

El documental griego que aquí les presentamos se llama "Deudocracia" (2011) y se difunde gratuitamente por internet bajo el consentimiento de sus autores  Katerina Kitidi y Aris Chatzistefanou, todo el mundo debe conocer la trampa del neoliberalismo, de quiénes son los verdaderos ladrones del futuro de los pueblos.



martes, 22 de julio de 2014

El Holodomor, la historia de un genocidio "conveniente"

Como ya hemos comentado en el pasado al tratar los casos del régimen de Nicolae Ceaușescu en Rumania, el de Pol Pot en Camboya o la Masacre de Katyń Médnoye, el Holodomor o Genocidio/Hambruna de Ucrania es un chivo expiatorio del que se toman muchos para ejemplificar el horror del socialismo. Así como una golondrina no hace primavera, una tragedia por aberrante que sea, no necesariamente está ligada a los ideales que el régimen que la perpetra dice respetar. La gente que se toma de esto por lo general son admiradores del franquismo, son filonazis o resultan ultra-católicos o muestran simpatías con el dominio estadounidense a escala global, es decir, la vieja y repetida historia del que critica los crímenes que comente su enemigo mientras omite o justifica los propios.

El vídeo que les presentamos remite a un drama que se vivió en la ex URSS entre 1932 y 1933, el período entre guerras donde gran parte del mundo estaba bajo las más terribles penurias económicas y trata sobre el hambre que padecieron un gran número de campesinos de la región occidental de la Unión Soviética que por entonces estaba liderada por el georgiano Iosef Stalin.
La historia cuenta que el régimen stalinista en la década del '30 confiscó tierras de campesinos ucranianos que ahora iban a producir para el estado. Fue justamente por aquellos años en que la región sur-occidental de la URSS sufrió una importante época de sequía, esto sumado a la crisis económica post depresión económica de 1929 y a ciertas desinteligencias del gobierno de Moscú fueron fatales para muchos pueblos campesinos.
Iosef Stalin
La crisis afectó vastas zonas de la URSS, el hambre mató no sólo a ucranianos, que si bien habrían sido mayoritarios en los 8 millones de víctimas documentadas por las estadísticas más serias, entre los muertos debemos sumar a rusos , tártaros y kazajos. Éstos últimos han sido tantos que su población disminuyó en un tercio, sin embargo nadie habla del "genocidio de Kazakhstan". La URSS ya había atravesado una etapa de hambre en el año 1921, este fenómeno no era nuevo.

Con el tiempo, el Presidente de EEUU Ronald Reagan utilizó el drama en cuestión para denunciar que Moscú deliberadamente decidió condenar a la muerte por hambre del pueblo ucraniano en lo que se enmarcaría como un genocidio. No sabemos cuánto sabía Reagan de la crisis interna soviética que la llevaría a su caída en 1991, lo cierto es que el republicano mandó hacer un informe basado en testimonios de exiliados ucranianos en EEUU y Canadá sobre lo vivido en aquellos años y la conclusión fue que se organizó un genocidio (el gobierno de Reagan fue el primero en utilizar este término en 1984) contra el pueblo ucraniano. Todos sabemos que un buen imperio se basa en la teoría del "divide y reinarás" y qué mejor que alentar los viejos odios nacionalistas (o crearlos) dentro del principal rival de EEUU: la decadente Unión Soviética.

En la actualidad el genocidio ucraniano es enseñado en las escuelas de Ucrania como parte de la historia nacional y hasta se hacen actos oficiales en homenaje a las víctimas, sin embargo muchos historiadores y politólogos ponen en duda el objetivo soviético de diezmar a la población ucraniana bajo el argumento que hubo intentos de ayuda documentados por parte del gobierno pero que fueron llevados a cabo pésimamente. Uno de los que cuestionan el discurso oficial es el Profesor de Historia de la Universidad de West Virginia (EEUU) Mark Tauger quien sostiene que la comisión que ordenó Reagan para investigar el genocidio ucraniano tenía como objetivo demonizar una vez más al régimen soviético, una estrategia que los neoconservadores en EEUU llevaban a cabo desde los años 70, bajo la doctrina de Leo Strauss, en la cual se exageraba el poder de destrucción y de conspiración de los soviéticos para justificar la Doctrina de Seguridad Nacional, la injerencia norteamericana en terceros países (Plan Cóndor), guerras como las de Corea o Vietnam y también la carrera armamentista que implicaba el desarrollo de armamento nuclear.

Hoy se ve que el Holodomor forma parte del discurso histórico ucraniano, sirve para reafirmar cierto honor nacional porque se acusa a Moscú de llevarlo a cabo ante el riesgo que implicaba el presunto crecimiento de Ucrania en aquel entonces, que ponía en riesgo el liderazgo ruso. Este relato fue desarrollado luego de la caída del Muro de Berlín en concordancia con los sentimientos anti-rusos de parte de los ucranianos. Esto implica considerar a los viejos Mujiks (ricos campesinos cuyas tierras fueron expropiadas por el régimen soviético) como héroes. Los gobiernos pro-europeos de Ucrania como el de Víktor Yuschenko usan el relato del genocidio para reforzar su alejamiento de Rusia basado en este terrible hecho histórico como si sólo fuera una brutalidad contra los ucranianos exclusivamente.
La hambruna de Ucrania nos explica la compleja situación en la que vive este país de Europa Oriental, de cómo se siembra el odio basándose en acontecimientos históricos poco claros, pero revelados de manera tendenciosa. Esta es la semilla del nacionalismo, el cual se hizo presente en Kiev y en otras regiones ucranianas de la peor forma.
Si la historia la escriben los que ganan...

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sábado, 19 de julio de 2014

Ni el cuco, ni el hombre de la bolsa, el enemigo de los niños es el Dios Mercado


Los niños consumidores
Todo el mundo sabe que los niños suelen tener caprichos, muchas veces los padres deben optar entre ceder al pedido o verse inmersos en una discusión que puede terminar en berrinches y en escenas incómodas. Esto no es nada anormal, lo malo es que el mercado se abuse de esta situación para su propio beneficio. Se le hace creer al niño que el no tener lo último, lo que usan todos los niños que son felices los hace inferiores a sus pares, hace que jueguen peor y los pequeños caen fácilmente en esa trampa, y los padres también.
En la actualidad los niños pasan mucho tiempo frente al televisor, computadora y hasta usando ipads o celulares, aparatos que los mantienen apartados del mundo real manteniendo su atención con imágenes creadas persé y atiborrándolos de publicidad. Esto viene ligado a un cambio social que se está dando mucho por estos días. Los padres no pasan tanto tiempo con sus hijos como antes dado que quizá ambos trabajan o tienen algún tipo de conflicto conyugal. En ese tiempo que los chicos actuales no tienen la atención de sus padres es cubierto por artefactos que los tengan ocupados "sin molestar". El esparcimiento (no pocas veces culposo) que comparten padres e hijos se da durante las vacaciones o en algún fin de semana y por lo general involucra llevar al niño a un lugar rebosante de tentaciones consumistas: juegos, películas (de pobre calidad argumental pero con un estudiado exceso de color y formas), alimentos y bebidas chatarra (que consumen los ídolos de sus series), juguetes (también de pobre calidad, para que persista la industria), muñecos,... lo que ahora se considera una "tarde en familia". Los hábitos de consumo de los EEUU han logrado imponerse en otras partes del mundo, basta con ir un fin de semana a un centro comercial para ver la cantidad de niños que pasan la tarde allí entretenidos con todo lo que allí se ofrece.
Hay un gran número de productos destinados a los niños, y el mercado usa los antojos desenfrenados de los infantes para sacar su beneficio. Se acostumbra a los niños desde pequeños a consumir, se liga su diversión al consumo, por tener el mejor juguete, la mejor ropa o los elementos "oficiales" de su personaje favorito del momento. Los programas infantiles, salvo honrosas excepciones, tienen publicidad subliminal y cada vez son más habituales los personajes interesados en el dinero que suelen ser tildados de "populares": a las niñas se les dice que deben ser lindas y tener la mejor ropa de diseño, a los chicos que basta con tener un determinado estilo para estar en el bando de los ganadores.

"Qué rápido crecen..."
Esta frase la vienen repitiendo los adultos desde tiempos inmemoriales, quizá para quedar bien con los padres del niño/a en ese irrefrenable (y sano) orgullo por su creciente madurez. Esto suele ser una trampa, no necesariamente los niños actuales son más inteligentes por saber usar un iPad, no está demostrado que su interrelación con las nuevas tecnologías les dé a los niños actuales una ventaja con respecto a los que jugaban Nintendo ni estos fueron "superiores" a los que crecieron con la televisión, que tampoco se destacaron con respecto a aquellos que jugaban con modestísimos soldaditos de plomo. La inteligencia del niño se potencia mediante una buena alimentación y haciéndolo pensar, acción que erróneamente se cree nociva para los pequeños.
La cuestión de la ropa tampoco es menor, los niños se ven estimulados a vestir y a comportarse como adolescentes. Los límites entre adolescencia y niñez son cada vez más borrosos y para colmo muchos alientan a sus hijos pequeños a que adopten comportamientos ajenos a su edad. Esto también es confundido con un gesto de madurez, pero en realidad son empujados por el mercado a utilizar bienes que son consumidos por personas mayores, que a la vez son consumidores insatisfechos. El caso de la ropa y cosméticos resulta bastante peligroso dado que algunas producciones de moda de niños "precoces" (infame adjetivo, los niños no deben quemar etapas aceleradamente) no distan mucho de un book para pederastas...

La diversión violenta
Es probable que nuestra infancia haya transcurrido entre juguetes "característicos" por género: muñecas y elementos de madre/ama de casa para las niñas y autos, pelotas y juguetes bélicos para los niños. Culturalmente esto implicaba un mensaje subliminal que nadie ponía en duda: las niñas eran preparadas para la vida casera y de madre, mientras que a los niños se los relacionaba con el mando, la rudeza. Esto implica que mediante el juego, el niño se familiariza con conceptos impuestos culturalmente.
El tema del bien y del mal es algo que aparece permanentemente en el juego y en las historias infantiles (cuentos, películas, canciones, fábulas) que si bien en muchos casos intentan dejar un mensaje ejemplificador, en otros se impone la idea de que "los malos" lo son por gusto, y que los conflictos se resuelven mediante la violencia. La maldad incorregible es un concepto que muchos sostienen hasta la adultez, donde la mala reputación de los "villanos" de turno imposibilita cualquier diplomacia reparadora basada en el diálogo. Estas actitudes son las que sostienen la mano dura ante los descarriados de la sociedad.

Generaciones consumistas
Ya hay padres ultraconsumistas que fueron criados en medio de este sistema y criarán a sus hijos así, el mercado se defiende bajo premisas tales como "los padres deben decidir por sus hijos"... en este escenario no queda mucha opción, bajo el discurso monopólico de la publicidad (abierta y subliminal), la imposición de modas, de conceptos como que el consumo de cosas nuevas nos brinda felicidad, aquellos que crecieron bajo estos mensajes difícilmente le brinden algo más instructivo a sus hijos.
Salvo que antes de convertirse en padres, hayan abierto los ojos.



sábado, 12 de julio de 2014

El negocio del presidio en el país de la libertad

Mucha gente cuando habla desde el prejuicio, al citar países donde hay falta de libertad y mucha gente presa, tiende a mencionar Cuba, algún "país islámico/árabe", Corea del Norte e incluso China, sin embargo no son muchos los que citen a EEUU donde 2 de cada 300 habitantes está metido en la cárcel.
El país del norte ostenta un triste récord en materia de encarcelamientos, es el país no sólo con mayor número de presos del mundo sino también el que más alta proporción de ciudadanos encarcelados tiene sobre la población total muy por encima tanto de otros países industrializados como de estados signados de "tiranías" donde, se dice, peligran las libertades individuales (caso de Irán, Venezuela, Rusia o Siria).
Muchas de las penitenciarías en EEUU son explotadas por el capital privado exclusivamente, dicho régimen ha sido exportado a otros países, en algunos con ciertas limitaciones, por ejemplo se exhiben modelos mixtos de administración como el caso puntual de Francia.
La obsesión que tienen los estadounidenses por la vida carcelaria sumada a cierta admiración por los uniformados duros contra la delincuencia y a una mirada naif acerca de la justicia adonde el bien debe penalizar al mal, ha generado un negocio insospechado alrededor de las cárceles que promueve su instalación con tantas facilidades como las que se necesitarían para abrir una panadería. En EEUU cualquier ciudadano que cuente con el capital necesario y bajo requisitos no del todo imposibles puede abrir su propia cárcel. Esto derivó en un negocio inusual para cualquiera de nosotros, ferias carcelarias adonde podemos comprar objetos para nuestra prisión: sillas para atar reclusos, diferentes tipos de balas, rifles, pistolas, cachiporras y uniformes para amortiguar golpes. El mercado carcelario tiene hasta su propia revista, lo que se dice, una industria sin humo, o al menos así la promueven.
Proporción de presos en EEUU (Fuente TELAM)
Los propagandistas de la libertad de mercado y antiestatismo no se cansan de repetir que el capital privado es más eficiente que el estado para administrar cárceles, aunque en realidad eso se puede discutir, lo que realmente le interesa a estos capitalistas es el uso de los presos como mano de obra barata, algo habitual en EEUU. Tampoco faltan los abusos, la violación de DDHH contra los presos entre otras humillaciones.
Resulta extraño que un país que se muestra como ejemplo de libertad sea el que mayor número de presidiarios tiene, que en su inmensa mayoría son negros o hispanoamericanos y rara vez cuenta con algún dueño de algún banco o con algún especulador de Wall Street. Este es el concepto que nos impusieron, donde el único delito posible es aquel que llevan a cabo, por lo general con violencia, los sectores marginales, empobrecidos de la población y no así los delitos derivados del capitalismo, de la usura, de la avaricia.
Este documental nos debería hacer pensar en qué concepto de justicia existe en EEUU, ¿se condena a una persona por el delito que se supone cometió o para que un empresario de las cárceles sume una nueva víctima para la esclavización y para ganar dinero? Aquí no se habla de las ya cuestionadas y repudiadas cárceles ilegales que EEUU instaló en Irak, Guantánamo y en otros estados de manera ilegal (España, Rumania), estas son cárceles legales, en territorio estadounidense.
Este modelo, nos lo quieren imponer a nosotros, muchos creen que un gran número de cárceles es garantía de justicia, quizá sólo sea una medida de control social para los marginados con la cual algunos, de paso, hacen dinero. Desde ya, que un mismo estado tenga semejante proporción de reclusos sobre el total de la población indica que algo mal deben estar haciendo, no?