La verdad, aunque esté en minoría, sigue siendo la verdad...

La burguesía disfraza su propio interés particular, para que de tal forma, ese interés particular forme parte del interes general

miércoles, 14 de marzo de 2018

El Imperio de Bruselas

La Unión Europea surgió en 1993 al calor de la caída del muro de Berlín. La hegemonía capitalista parecía incuestionable y el acuerdo entre países europeos que se habían enfrentado en innumerables guerras (dos de ellas llamadas mundiales en el siglo pasado) parecía un milagro, el verdadero fin de la historia, parecía que todo se arreglaba y el mundo alcanzaría la paz, el bienestar y la justicia.
Este pacto aparentemente político creó una moneda común, el euro, además fue ganando socios entre ex repúblicas soviéticas logrando un triunfo sobre los intereses de Rusia, ese enemigo enorme que no deja tranquila al resto de Europa.
Este pacto entre sociedades modernas generó las adhesiones de países de Europa oriental, más atrasados económicamente, confiando en que esta alianza con sus vecinos ricos del oeste les traería la prosperidad tan anhelada.
Sin embargo con el tiempo caímos en la cuenta que la Unión Europea es un pacto más económico de privados que político entre países, nuevamente un grupo de corporaciones se esconde bajo el ala de los gobiernos para obtener beneficios de un acuerdo que se ofrece como provechoso en lo político para el gran público.
La sede de gobierno de la UE está en Bruselas, Bélgica. Allí los lobbys empresarios operan en las sombras para  hacerse de negocios opuestos a los intereses de ciudadanos europeos quienes casi nunca llegarán a conocer a los que les provocan estos perjuicios, con suerte sabrán de la existencia de aquellos euro-diputados que avalaron estos acuerdos (que son los que terminan dando la cara, cuando alguien la da) y en el peor de los casos no serán reelectos en el cargo y por los servicios prestados serán premiados con un puesto en alguna empresa privada a la que beneficiaron.



A 25 años de la creación de la UE se observa descontento en muchos países, el Reino Unido optó por separarse de la Unión, se cree que en un futuro Italia y Dinamarca podrían adoptar una decisión similar, la crisis catalana en España, los graves problemas económicos de Grecia  que se tuvo que humillar ante las reprimendas de los "comisarios" europeos que forzaron a este país a cumplir las metas económicas impuestas (las cuales nunca tienden a beneficiar al pueblo griego). Tampoco existe una euromaravilla para los socios del este incorporados más recientemente. Países como Hungría, Chequia, Bulgaria o Polonia, son la mano de obra barata de empresas alemanas que se instalan en estos lugares por el alto nivel de sus obreros y sus bajos salarios, haciendo que las empresas alemanas ganen competitividad gracias a las ventajas de un mercado común hecho a la medida de las grandes empresas.
Un disfraz democrático y de reconciliación para otro experimento neoliberal en las sombras.